Yo voto PSOE en CyL. 4 razones

       Solo cuatro sí, cuatro sencillas y contundentes razones para votar al PSOE. Tres, porque como ciudadanos nos interesa mucho, y una, porque no lo podemos consentir. A saber:

Primera: La mayoría de los pocos jóvenes que nos quedan en Castilla y León no han conocido más que gobiernos del PP. Durante 35 años solamente han escuchado promesas incumplidas sobre empleo de calidad, vivienda joven y accesible, becas y ayudas para el estudio, bonificaciones en los transportes, facilidades para formar una familia y posibilidad de asentamiento o permanencia en nuestros pueblos y ciudades.

     Recuerda elector los repetitivos discursos de altos cargos políticos del PP prometiendo tomar cientos de medidas para evitar la fuga de nuestros jóvenes a otras comunidades. Ayuso se vanagloria de que Madrid sea un aspirador de jóvenes preparados en otros territorios de España.

Segunda: Si no te encuentras bien, tu médico de familia está atascado de citas y tardará unos días en poder atenderte. Si considerase que tiene que visitarte un especialista, esperarás durante meses con la incertidumbre de si eso que te ha salido o te molesta será “algo malo”. Cuando ya han decidido que sí lo tienes, la intervención o la consulta de radioterapia será tarde y estará lejos.

      Durante 35 años el PP ha demostrado que la salud de sus conciudadanos solo le importa en campaña electoral. Es más, su líder Casado se enfada muchísimo si alguien, de acuerdo con las recomendaciones de la OMS, explica que hay que reducir el consumo de carne, de azúcares y de alcohol. Y volvemos a Ayuso. El candidato del PP promete seguir los pasos de Ayuso. Pues ya sabemos lo que toca: el médico está en casa de cada uno y los de la Seguridad Social son unos vagos. O si no, te apuntas a la privada.

Tercera: La despoblación rural y el envejecimiento alcanza niveles muy preocupantes. Da miedo ser persona mayor y vivir en uno de nuestros pueblos. Los estudiosos consideran “ámbito rural profundo” a los núcleos de población con menos de 2.000 habitantes, es decir, en nuestra comunidad casi el total del ámbito rural se califica como “profundo”. Damos pena. Hasta los inmigrantes extranjeros huyen. Ahora son más los que se van que los que vienen. Se van a otros lugares donde son bien acogidos y tienen posibilidades de trabajos dignos y de que les alquilen una vivienda para sus familias. Animales contaminantes son los nuevos pobladores que promueve el PP.

Cuarta: En esta hay tres cuestiones que no debemos permitir:

         –La interesada e inoportuna convocatoria de elecciones, con traición incluida a sus socios de gobierno y en plena pandemia, da muestra de que al PP solo le interesa el gobierno para calmar sus ansias de poder a cualquier precio y administrar los dineros que vienen de los fondos europeos. Para ello, no dudan en pretender sacar de sus casas un domingo a dos millones de electores, con el alto coste económico que supone la maquinaria electoral y que se podría invertir en bienestar ciudadano.

            ´-Bueno, y porque la corrupción les desborda de fango hasta las orejas. A partir del próximo mes se abren múltiples juicios por prevaricación, malversación de caudales públicos, falsedad documental, blanqueo de capitales, etc., en los que dirigentes del PP están inmersos hasta los huesos.

            -Y porque está claro que gobernarán con VOX, lo que nos colocaría en la recta final de la merma de la democracia y el fomento del racismo, la xenofobia, la desigualdad y el machismo carca y casposo que tanto nos está costando soltar.

            Por último, voto al PSOE por razones de utilidad y concentración de voto. Decidas lo que decidas, vota por tu bien. Espero no tener que titular dentro de unos días: Castellanos, leoneses, Franco ha vuelto.

4 años más sería demasiado (Elecciones 2022 CyL)

        En una casa cerrada se acumula el polvo; las esquinas y los rincones se llenan de telarañas, corren a sus anchas roedores y hacen sus nidos las cucarachas. Lo mismo ocurre en la casa de la democracia, que si no se abren las ventanas y las puertas, si no se ventila para que corra el aire y se vayan limpiando las suciedades, cuando nos demos cuenta estará inhabitable, los cristales ya no serán transparentes, no dejarán pasar la luz ni para ver de fuera a dentro ni de dentro afuera, la estructura estará carcomida, el olor a ratones y a suciedad será irrespirable. ¿Quién no ha entrado alguna vez en una casa así? Es lo que está pasando en la comunidad de Castilla y León, treinta y cinco años sin ventilar han dado lugar, nada menos, que a 18 casos de corrupción abiertos en sede judicial. Estamos hartos de oír hablar de la ‘La Perla Negra’, la ‘Trama eólica’ y la presunta financiación ilegal del PP de Salamanca en las primarias que ganó el hoy, otra vez, candidato. Y, en paralelo, los esfuerzos de Casado por alejar a la judicatura de la Justicia y  arrimarla a su costado.

        Pero, ya no es solo la gravedad de la corrupción en las instituciones, son las terribles políticas destinadas a la destrucción de los servicios públicos sociales. El candidato Fernández Mañueco ha declarado con rotundidad que el ejemplo y modelo para su gobierno es Ayuso. Ayuso es esa política del PP que está entregada a desmantelar la asistencia sanitaria en Madrid, que despide a once mil sanitarios, entre ellos mil noventa médicos, en plena pandemia y teniendo a todos agotados por intentar salvar las vidas de sus conciudadanos madrileños. ¿Libertad para morir a las puertas de un hospital? Esa es la promesa y eso es lo que se nos viene encima si el Partido Popular vuelve a ocupar la ruinosa casa de la democracia en Castilla y León.

        Aunque solo sea por higiene política, y al margen de ideologías, es preciso ventilar, que corra el aire, que entre la luz. Luego no nos quejemos de la carencia de médicos en nuestros pueblos, de la escasez de residencias y alojamientos para personas mayores (que somos mayoría), de la dependencia que crea la falta de transportes públicos en el medio rural, de la diáspora de los jóvenes, que son la sabia de la vida. Para los jóvenes…, nada en el programa electoral ¿Dónde están tus hijos? Con el mío, lejos de aquí. El PP en Castilla y León repite como un disco rayado el mismo discurso sobre la despoblación, palabrería pura. Así son menos y tocan a más porción del pastel. Estamos avisados, 39 años sin ventilar, se nos caerá la casa.

PP, despoblación y macrogranjas

       En junio de 2009, hace ya 12 años , el entonces presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, anunciaba a bombo y platillo su maravillosa Agenda de Población para frenar la despoblación entre 2010 y 2020. La basaba en «oportunidades para las personas y, concretamente, los jóvenes, las familias y los inmigrantes, es decir, los colectivos que más contribuyen al dinamismo demográfico». ¡Olé, qué bonitas palabras! Recordemos que el PP gobierna en Castilla y León desde 1987, es decir 35 añazos. Como resultado la población en esta comunidad ha mermado en 120.000 almas, un 5% del total frente al resto de España que ha crecido de media un 20,5%. Esta merma ha ido acompañada de una reducción de los servicios locales, sanitarios, educativos, comunitarios, etc. Así, según datos europeos en 2020 “el 76% de los municipios de Castilla y León estaba en una situación demográfica “grave o muy grave”, frente al 44% de la media española”. ¡Enhorabuena! Esto da mucha credibilidad a los programas del PP.

            De lo que no se ha privado el PP es de fomentar y autorizar macrogranjas, esas que dicen que no existen. A falta de habitantes humanos, el PP repuebla con cerdos nuestros pueblos, son dóciles, producen beneficios económicos a las grandes empresas y no plantean reivindicaciones molestas, como médicos de familia, Internet, recursos para personas mayores, etc. De hecho, en 2021 se censaron 4.340.122 cerdos ( frente a 2.394.918 personas) alojados en las “inexistentes” 550 macrogranjas. Es más, aprovechando las limitaciones de movilidad impuestas por la pandemia Fernández Mañueco redujo requisitos medioambientales por considerarlos «obsoletos, innecesarios o reiterativos», de modo que hasta 40.000 aves de corral, 2.000 cerdos de cebo o 750 cerdas de cría no precisarán autorización previa, bastará con que lo comuniquen a la administración. Vota PP, tápate la nariz y emigra.

Diario Palentino, 23 de enero de 2022.

¿Hay alguien ahí?

La corporación municipal de Palencia se compone de 25 ediles, de los que 11 pertenecen al PSOE, 9 al PP, 3 a Cs, 1 a VOX y 1 a GP. Recordemos que el alcalde, Mario Simón (Cs), gobierna en coalición con el PP y obtuvo la alcaldía con la abstención de VOX. El PSOE fue la lista más votada y no consiguió la abstención de Cs. Pues bien, ¿dónde están “casi” todos y a qué se dedican? Una gobernanza democrática se basa en gobierno y oposición, quien ejecuta y quien fiscaliza o propone, cada cual en su línea programática, pero todos hablando por los ciudadanos que entregamos nuestra soberanía y exigiremos cuentas en las próximas elecciones. Pues bien, el equipo de gobierno en Palencia se limita a administrar la gestión cotidiana sin más ambición (sobre el concejal de Urbanismo, otro día), sin proyectos de ciudad, sin alternativas a la sangría de población joven, comercial y de empleo. Solo un par de sus concejales parecen respirar actividad, la concejala de Cultura, Laura Lombraña, y el edil de Hacienda, Luis Miguel Cárcel.

Peor lo tenemos en la oposición. La del PSOE desaparecida. Se comenta que la portavoz, Mirian Andrés, está muy cansada y en el partido la mandarán a descansar a las cortes regionales o al Senado; claro que para hacerla senadora tendrían que cargarse a la malquerida diputada María Luz Martínez Seijo, por eso de que dos mujeres no encabecen candidaturas a las Cortes Generales. Una amistad de la prensa me comenta que “bastante entretenidos están los socialistas con hacerse oposición entre ellos mismos”. Al final, el frente más presente lo protagoniza Sonia Lalanda (VOX), curioso, la que dio la alcaldía a Cs. Algunos vivimos huérfanos, 16.303 votantes socialistas a la espera de que alguno de nuestros once representantes levante el dedo y diga algo por nosotros.

Diario Palentino (corregido) , 19 de diciembre de 2021.

Guerra de líderes

           La democracia, como elemento vivo, es cambiante. Según las circunstancias en las que viva un pueblo así exigirá a sus representantes. Se ha visto en las últimas elecciones madrileñas. El Partido Popular no ha digerido la moción de censura que cambió a Rajoy por Sánchez en la Moncloa. La deriva de Albert Rivera hacia el PP, y la negativa de los populares a abstenerse en la investidura de Sánchez empujaron al PSOE a volver la vista hacia Unidas Podemos. A partir de ese momento la consigna de las derechas ha sido duro y a la cabeza. El PP no se ha privado de utilizar torticeramente a los representantes de todas las instituciones como esbirros para lanzar dardos en cada aparición en los medios, aunque fuera para cortar cintas en inauguraciones y con la bandera española detrás. Ya no hay guerra de partidos ni de siglas ni de ideologías. Las derechas han presentado a Sánchez como enemigo de los españoles y han utilizado a Iglesias como ariete para desmerecer a todo el gobierno. Ayuso se ha configurado como una versión de Margaret Thatcher. De hecho, si echamos un vistazo a las hemerotecas repite al pie de la letra sus frases. La joven Ayuso que en medio de la pandemia se presentó como una loca inconsciente, incluso para los barones de su propio partido, resultó que tenía una campaña bien orquestada y aprovechando el hartazgo de ciudadanos, comerciantes y hosteleros les gritó lo que querían escuchar: Madrid first, first, first. Poco tenía que hacer el durmiente Gabilondo ante tal embestida, aunque el responsable no fuera él, sino quien le puso. Desde ahora la política española tomará el camino del liderazgo, no valdrá cualquiera para encabezar una lista contando con el apoyo del aparato del partido y el voto fiel de afiliados y simpatizantes; el carisma personal será lo determinante. Se necesitan ejemplares alfa.

Diario Palentino, 9 de mayo de 2021