Cuando yo le conocí estaba al frente del INEM, en un momento en que en España se estaba dejando sentir el eco de la difícil tarea de la reconversión industrial, miles de trabajadores se quedaban en la calle y debían reciclarse para encontrar nuevos empleos. Era el tiempo de la fuerte apuesta socialista por comenzar a preparar el ingreso de España en la Comunidad Europea. Al INEM de Palencia, como al resto del país, llegaba dinero europeo en ingentes cantidades, para que a través de escuelas taller, talleres de empleo y cursos de formación, se creara una mano de obra especializada en oficios que permitiera, por un lado mejorar la cualificación profesional y técnica del empleado y por otra igualarnos a los europeos mas desarrollados. Castañeda organizó, administró y controló todos aquellos fondos con maestría y desvelo. Siempre estuvo donde tuvo que estar e hizo las cosas como se debía.

            Bajo los gobiernos socialistas ocupó diversos cargos provinciales, fue Director Provincial del Ministerio de Transportes, Turismo y Comunicaciones, después el mismo pero en el Ministerio de Obras Públicas y Medio Ambiente hasta 1996 en que gana las elecciones el Partido Popular. Castañeda trabajó con igual dedicación y empeño, en jornada de mañana y tarde que ha hecho siempre en todos sus trabajos.

            Tras un alejamiento de la política permaneció en su cargo de funcionario hasta que retornó en la candidatura del PSOE al Ayuntamiento de Palencia en 1999. Primer Teniente de Alcalde, Portavoz del equipo de gobierno, Concejal delegado del área de Organización y Personal, Turismo y Desarrollo Económico, demostró una vez más ser un político de altura, un dirigente esmerado y  para todos, un compañero insustituible, afable, siempre dispuesto a escuchar y echar una mano. Al  ganar el PSOE las elecciones nacionales del 2003 es designado Subdelegado de Gobierno hasta su dimisión voluntaria recientemente.

            Integro y honesto a carta cabal en estos tiempos que corren de tanta zozobra, ha sabido hacer en todo momento su trabajo. Y no sólo en su faceta pública, el partido socialista en Palencia debe mucho a Castañeda. Durante muchos años le pudimos encontrar en la más dura tarea de partido que muy pocos quieren y saben hacer, buscar en la provincia candidatos para confeccionar las listas electorales en los comicios locales.

A lo largo de su mucha dedicación y trabajo para la causa socialista, Gabriel desempeñó varias secretarías ejecutivas, entre otras la de Comunicación, y otros muchos cargos orgánicos internos del partido, fue miembro del Comité Regional, del Comité Provincial y de la Comisión Ejecutiva Local.

Socialista hasta la médula, por formación y convicción, en cada una de sus actuaciones nunca perdió de vista el objetivo ideológico que le mantenía en la política, porque la pertenencia a un partido político no es garantía de una ideología como tampoco lo es la no pertenencia, hay muchos socialistas no sindicados y también muchos tibios afiliados, los hay incluso que ya han olvidado porqué están y como llegaron. Castañeda es un ejemplar de coherencia.

Sufridor inagotable de quienes se creían con mejor derecho a decidir y a ordenar, supo hacer y callar sin ruido. Afortunado de poder decir adiós con la cabeza alta por el deber cumplido y desde la cúspide del poder provincial. Maria del Mar, su apoyo incondicional, se lo agradecerá.

            Desde ésta mi pluma, al servicio hoy de una justa y merecida despedida, todas las personas amigas que tienes, que son muchas más de las que puedes imaginar, te deseamos lo mejor para el año que comienza y los que vengan detrás. «Diario Palentino, 23 de diciembre de 2007